Vie. Abr 19th, 2024

Este 12 de junio se conmemora el Día Mundial contra el Trabajo Infantil, sin embargo, para este 2020, sus avances se han visto comprometidos debido al impacto de la crisis actual ocasionada por la pandemia de coronavirus COVID-19.

 

Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) “152 millones son víctimas del trabajo infantil, y casi la mitad, 73 millones, están en situación de trabajo infantil peligroso”.

 

“Casi la mitad de los 152 millones de niños víctimas del trabajo infantil tienen entre 5 y 11 años; 42 millones (28%) tienen entre 12 y 14 años; y 37 millones (24%), entre 15 y 17 años”, señala la OIT.

 

Asimismo, el organismo internacional apunta que el trabajo infantil se concentra principalmente en el sector de agricultura (71%), tanto de subsistencia como la comercial; otro 17% trabaja en servicios y un 12% se encuentra en el sector industrial, principalmente en minería.

 

Fuente video: Canal capital Bogotá

 

En un documento reciente de la OIT que aborda el “impacto del COVID-19 en el trabajo infantil y el trabajo forzoso”, se afirma que la crisis económica y social afectará especialmente a los niños.

 

“Se estima que este año entre 42 y 66 millones de niños podrían caer en la pobreza extrema como resultado de la crisis, lo que se suma a los 386 millones de niños que en 2019 ya se encontraban en situación de pobreza extrema”, pronostica.

 

Al finalizar la Audiencia General del miércoles 10 de junio de 2020, el Papa Francisco realizó un llamado a favor de los niños y niñas que son explotados en el trabajo, y recordó que los menores “son el futuro de la familia humana”, y por ello a “todos nos concierne la tarea de favorecer su crecimiento, salud y serenidad”.

El Santo Padre resaltó que el trabajo infantil se trata de “un fenómeno que priva a niños y niñas de su infancia y pone en peligro su desarrollo integral”.

 

“En la actual situación de emergencia sanitaria, en varios países muchos niños y jóvenes se ven obligados a realizar trabajos inadecuados para su edad, a fin de ayudar a sus familias en condiciones de extrema pobreza. En no pocos casos se trata de formas de esclavitud y reclusión, que provocan sufrimiento físico y psicológico”, advirtió el Obispo de Roma.

 

Ante esta difícil realidad, el Papa Francisco hizo un nuevo llamado a todas las instituciones “para que hagan todo lo posible por proteger a los menores, llenando las lagunas económicas y sociales que están en la base de la dinámica distorsionada dinámica en la que, lamentablemente, ellos se ven envueltos”.

 

Fuente: Vatican News